Especial
Düsseldorf
Con un oficio ecuménico se abrió ayer en la catedral de Colonia el acto de Estado organizado en Alemania por las 150 víctimas del vuelo de Germanwings que se estrelló el pasado 24 de marzo en los Alpes franceses, en el trayecto entre Barcelona y Düsseldorf.
La música del coro dio inicio a la ceremonia en la catedral, en la que se colocaron 150 velas junto al altar mayor, una por cada uno de los fallecidos, incluido el copiloto que presuntamente provocó de forma deliberada la catástrofe.
Alrededor de 500 familiares de las víctimas asisten al funeral, acompañados de voluntarios y psicólogos y de miembros de los equipos que participaron en las tareas de rescate.
El cardenal de Colonia, Rainer Woelki, celebra el oficio junto con la presidenta de la Iglesia Evangélica de Westfalia, Annette Kurschus, en un funeral con rango de acto de Estado al que asiste la la canciller Angela Merkel y el presidente Joachim Gauck.
