La malaria, enfermedad potencialmente mortal transmitida por mosquitos del género Anopheles, ha repuntado en el territorio venezolano, y esta vez con un agravante: no hay medicinas para su tratamiento.
Según Ana Carvajal, infectóloga y miembro de la Red Defendamos la Epidemiología, da cuenta de un incremento de 184.225 casos autóctonos para los primeros siete meses de 2017, lo que representa un aumento del 63,1% con respecto al período homólogo del 2016 (112.932 casos).
La patología, que tradicionalmente había estado confinada a los estados limítrofes como Bolívar, llegó a las ciudades principales del país. En tal sentido, Carvajal explicó que en Caracas los casos son importados, es decir los mosquitos vienen de otras regiones, tales como Amazonas, Sucre, Delta Amacuro, entre otras.
Esta situación, señaló, se debe a que la mayoría de los ciudadanos viene a las ciudades principales en busca de medicamentos, por lo que existe un aumento de los casos.
"No se están tomando las medidas adecuadas en cuanto al abordaje de la malaria, el estado Bolívar debe declararse en emergencia", agregó la especialista, quien reiteró que esta zona sigue siendo el foco de la afección, por lo que constituye una de las poblaciones más vulnerables debido a que no cuentan con medidas preventivas, como el resto del país.
Una de las cifras que más preocupa a los especialistas es el aumento de los casos en el estado Miranda, pues se han acumulado 520 episodios en 26 semanas. El municipio más afectado es Independencia, específicamente en las zonas de Santa Teresa del Tuy y Cartanal.
Para Carvajal esta crisis se debe al "descontrol, la desinformación, la improvisación en los programas de control de la malaria y de inmunizaciones; y a su vez, la falta de preparación del personal médico para realizar un diagnóstico".
La malaria en la frontera también ha causado varios casos exportados a los países vecinos. En Guyana 589 casos de la enfermedad son importados de Venezuela. En Colombia esta cifra es de 282, mientras que en Brasil es de 54; y finalmente en Guyana Francesa uno. "La situación es muy grave", acotó.
Tampoco hay fármacos para tratarla. Primaquina, atecilina y cloroquina son los principales. "Mientras más demoras en colocar el tratamiento, el pronóstico del paciente es peor", manifestó.
La enfermedad, cuyos primeros síntomas son fiebre, dolor de cabeza, escalofríos y vómitos, ha sido erradicada en seis países de los 21 que se registran en el continente, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Carvajal resaltó la importancia del diagnóstico de la enfermedad y del tratamiento de manera inmediata debido a que esta acción disminuiría los índices de mortalidad. Al mismo tiempo, recomendó a las personas el uso de camisas mangas largas, pantalones, mosquiteros y el uso de repelentes.
Fuente el universal